
El sistema es muy fácil. Busca una cuchara o un tenedor de madera. Es fácil encontrarlas en un buen tamaño en cualquier tienda donde vendan cosas de cocina y a precios bastante asequibles. Yo, por casualidad, encontré en un comercio cucharillas y tenedores de postre en madera.
- ¡Qué cucos! - Me dije. Y ala, para el cesto.

Claro, qué fácil, ponerle ojos, nariz, boca... ¿Pero cómo hacemos eso?
¡Con imaginación!
- Para los ojos podemos utilizar ojos móviles, chapas, tapones, botones..
- Para la nariz pueden ponerse pequeños pompones, una bolita de papel de seda de colores, algún botón...
- El pelo puede hacerse con lana, hilo, marabú... Se le puede poner algún sombrero realizado con cartulina o fieltro...
- La boca puede hacerse con papel, se le puede poner bigote...
Y todo ello puede ir pegado con cola de contacto.

¡Pues también podemos hacerlo a nuestro gusto y como mejor se nos ocurra!
- Podemos recortar la forma del cuerpo en una cartulina de color.
- Podemos dibujar un traje en una hoja blanca y colorearla a nuestro gusto.
- Podemos envolver el palo de la chucara o el tenedor con papel de seda o telas.
La cara, el cuerpo con su vestido... ¡Ya está! Como veis, es muy sencillo y muy divertido.
¡Tenéis muchas posibilidades!